Acaba de estrenarse en Amsterdam un nuevo servicio de transporte público muy práctico y ecológico conocido como Hopper. El servicio consiste en scooters eléctricos con conductor que permiten el transporte público individual para llevar al destino de forma rápida.
Cada viaje en uno de estos scooters cuesta un importe fijo de 2,50 € independientemente del trayecto, eso sí, siempre dentro de los límites del casco urbano. El servicio está operativo en días laborables de lunes a viernes de 8 de la mañana a 8 de la noche. Para poder solicitar el servicio de uno de estos vehículos puede hacerse de diferentes formas, a través de un teléfono de contacto, desde su página web, desde una aplicación para móvil que todavía no está disponible o, como si de un taxi cualquiera se tratara, haciendo una señal a uno de los scooters que pasen vacíos por la calle.
Amsterdam es la primera capital europea que ofrece este servicio que, además de la agilidad con la que es capaz de llevar a los viajeros, es altamente beneficiosa para el tráfico y la contaminación de la ciudad:
- Los scooters eléctricos son limpios, se calcula que un 68 % más que uno de gasolina a lo largo de toda su vida útil.
- No hacen ruido ni despiden olores.
- Son sostenibles, sólo el 10% de las piezas de un scooter de gasolina se emplean en el eléctrico. Carecen de caja de cambios, cilindros, cadena, carburador, o tubo de escape. Esto se traduce en un menor mantenimiento y una vida útil más larga.
- Contribuyen a una mejora del flujo del tráfico por su tamaño reducido y su alta movilidad.
Hopper es el resultado de la colaboración público-privada en la que han colaborado empresas y administraciones como el Ministerio de Infraestructuras y Medio Ambiente para tratar de resolver los problemas metropolitanos de transporte.
En breve, se iniciará este mismo servicio en otras ciudades holandesas importantes, Rotterdam, La Haya y Utrecht pronto contarán con él.