La usabilidad se refiere a la facilidad con que las personas pueden utilizar una herramienta particular o cualquier otro objeto fabricado por humanos. Cada día las herramientas disponibles para la gestión de la conservación y explotación de las infraestructuras son más complejas, y por ello este aspecto es cada vez más importante.
Para que un software sea utilizado se deben cumplir varios puntos, todos ellos muy relacionados: que se imponga su implantación, que se obtenga algún tipo de ventaja con su uso, y que sea fácil e intuitivo. Si no se cumplen estos tres aspectos, estamos abocados al fracaso.
Y es que nada me sirve un software que presente mejoras sustanciales y sea fácil de utilizar si no impongo su uso, porque el usuario va a seguir utilizando lo que ya tenía; tampoco sirve de mucho imponer el uso de un software por fácil que sea de manejar, si no presenta mejoras para la gestión, que es el caso que nos ocupa, ya que estaremos perdiendo tiempo y dinero; y tampoco sirve de mucho imponer la implantación de un software que conlleve grandes beneficios si su uso es extremadamente complejo, porque al final el usuario no va a poder aprovecharlo al 100%, o quizás ni pueda aprender a utilizarlo, y ello conlleva la pérdida de productividad, con lo cual también hemos fracaso.
Por todo ello, en el desarrollo de cualquier herramienta de gestión es muy importante tener todo esto en cuenta, e intentar conjugar dos aspectos muy diferentes: la capacidad de proceso del software de gestión con la usabilidad del mismo.
En el desarrollo de SmartRoads y SmartFacilities siempre tenemos muy en cuenta estos puntos, de modo que cualquier nueva funcionalidad no es validada hasta que comprobamos que, en primer lugar, supone una mejora para el proceso de gestión (ya sea aportando nuevas características, reduciendo el tiempo de uso o cualquier otro tipo de mejora), y en segundo lugar, que sea usable.
Un sistema de gestión de carreteras, espacios o infraestructuras en general, será más usable cuanto más rápido y fácil permita al usuario registrar y acceder a la información. De nada sirve tener muchos datos almacenados si no somos capaces de utilizarlos de forma provechosa, lo mismo que de nada sirve tener gran cantidad de informes si no somos capaces de registrar de forma eficiente los datos que los generan.
Para garantizar estos puntos, nuestros sistemas está en constante evolución. Recientemente hemos incorporado características muy novedosas, como la generación de informes en cualquier tipo de documento exportable (PDF, XLS, csv, doc, docx, xlsx, rtf…). Pero no sólo eso, también hemos incorporado pequeñas mejoras a nivel gráfico, como barras de progreso que permiten al usuario identificar de forma muy rápida el estado actual de una tarea de agenda de vialidad, de conservación o de rehabilitación.
Como hemos dicho, no sólo debe mejorarse el acceso a la información, si no que también tenemos que asegurarnos de que el registro de ésta sea eficiente. Un ejemplo de las mejoras que pueden realizarse en este campo, y que tanto SmartRoads como SmartFacilities ya incorporan, es la digitalización de firmas, de modo que cualquier usuario puede firmar un documento directamente desde su ordenador o dispositivo móvil, para posteriormente generar un documento ya firmado y acelerar el proceso de validación.
Son pequeños detalles que facilitan al usuario el manejo del sistema, que garantizan al cliente que utiliza el software que va a aumentar su productividad reduciendo el tiempo de gestión de la información, y por tanto el coste, y que hacen que los sistemas sean usables.