La enorme contaminación existente en las ciudades está llevando a Ayuntamientos y municipios a tomar medidas innovadoras y una de ella puede ser la colocación de radares de contaminación, que son sistemas capaces de conocer exactamente lo que contamina cada vehículo que pasa.
La idea es que el primero de estos radares se coloque en Madrid, aunque con un objeto puramente informativo, no para multar.
El objetivo de estos sistemas, a medio plazo, es poder identificar a los vehículos que son más contaminantes (aproximadamente un 5 % de éstos produce un 90 % de la contaminación), para poder tomar las medidas necesarias para reducir la contaminación en las zonas más problemáticas.
Además, una vez que existan radares de estas características implantados por toda la ciudad, se podrá conocer en tiempo real las zonas más contaminadas de la ciudad así como los tipos de vehículos causantes, lo que permitirá a las administraciones desarrollar políticas viales que contribuyan a compensar estos efectos, priorizando vías con menor contaminación, o reduciendo las velocidades máximas por las que se puede circular en determinadas zonas.
De igual forma, permitiría conocer de forma exacta los vehículos que realmente ocasionan una contaminación demasiado elevada, para imponer sanciones (ante incumplimientos de lo establecido por la ley), o tener una información que permita adecuar la legislación vigente penalizando a este tipo de vehículos.
Una medida que puede ser muy necesaria, en vista del importante problema de contaminación que existe en nuestras ciudades.