En ocasiones, por un despiste del conductor, éste no es consciente de si se encuentra en una autovía o una carretera convencional, con doble sentido de circulación, lo que puede representar un importante problema.
Para solucionar este inconveniente y evitar posibles despistes, de una forma económica pero muy eficaz, el Departamento de Territorio y Sostenibilidad de Cataluña ha comenzado a colocar en algunas carreteras de doble vía problemáticas una imponente línea roja que delimita ambos sentidos.
La medida consiste en una franja central de aproximadamente 30 centímetros, de color rojo (y blanco en los extremos), unido a unos marcadores sonoros que consiguen un doble objetivo: por una parte alertar visualmente de forma rápida que la vía es de doble sentido, y por otra, emitir un sonido siempre que un conductor circula sobre la línea, para evitar problemas.
La medida, que puede ofrecer una importante mejora de la seguridad vial a un coste bajo, se está comenzando a implantar en algunas carreteras catalanas, y esperemos que resulte eficaz para reducir el número de accidentes en las mismas.