A través de la página web de Asefma (Asociación Española de Fabricantes de Mezclas Asfálticas) conocemos las conclusiones ofrecidas por la Comisión Europea, dentro de su último Eurobarómetro sobre la calidad del transporte, y los resultados no dejan dudas sobre la percepción real de la gente: Para conseguir mejorar la seguridad vial, la prioridad debe ser contar con unas carreteras en un estado de conservación óptimo.

Como hemos dicho en muchas ocasiones, contar con unas carreteras en un estado óptimo de conservación requiere, sobre todo en épocas de ajustes presupuestarios como las actuales, aprovechar al máximo los recursos existentes, y optimizar los trabajos a desarrollar.

Llegados a este punto no está de más recordar algunas de las indicaciones que ya hemos comentado en otros post de Tecnocarreteras, pero que tienen plena vigencia en la actualidad:

• 1.- Es imprescindible anticiparse en la conservación de infraestructuras, ser capaces de resolver los pequeños problemas existentes a tiempo, evitando de esta forma acometer obras de mayor importancia y coste, que además puedan requerir trabajos que impidan la circulación.

• 2.- Usar sistemas tecnológicos para saber cómo se encuentran los diferentes elementos de la carretera (tanto relativos al inventario, como al propio firme), cuáles se deben reparar, y qué acciones son más eficaces a tomar en cada escenario.

• 3.- Exigir mucho más en relación a los pliegos de carreteras, por ejemplo, que los contratistas cumplan al detalle lo ofertado (eliminando la costumbre de los añadidos), y que las ofertas puntúen mucho más los aspectos relativos a la innovación y experiencia, en detrimento de la oferta económica porque, aunque pueda parecer contraintuitivo, acaba siendo lo más beneficioso para las arcas públicas.

• 4.- Conseguir que el espíritu crítico de los ciudadanos aumente, algo que se está consiguiendo, y reclamen cuando observen cualquier vía en mal estado, notifiquen incidencias y participen de forma mucho más activa para conseguir tener unas carreteras en buen estado. 

• 5.- Priorizar las inversiones, y realizarlas con criterios de eficiencia, de forma que se eviten nuevos despilfarros de dinero en inversiones poco utilizadas como determinadas líneas de AVE, y se emplee el dinero donde más se necesita, como es en las carreteras.

Son medidas obvias, pero que todos los del sector de las carreteras estamos en la obligación de recordar de vez en cuando, para conseguir tener unas vías mucho mejor conservadas y seguras.

Adjunto con la noticia, incluimos el documentado citado del Eurobarometro 422a sobre Calidad del Transporte, realizado por la Comisión Europea.