El problema de los accidentes provocados por animales en las carreteras es mucho más importante de lo que puede parecer a simple vista, siendo la causa de cerca del 9% del número de accidentes totales, y costando a las arcas del Estado, según ha calculado un estudio de la Universidad Complutense de Madrid, la cifra de 105 millones de euros al año.
Las cifras, como vemos, obligan a tomar medidas que nos permitan reducir este problema, y aquí queremos mostrar algunas medidas que, sin duda, podrían ser útiles:
- 1.- Determinar con precisión las zonas donde se producen los accidentes, y los animales implicados en los mismos. Para conocer estas zonas, es necesario hacer un uso eficaz de la tecnología, contando con sistemas que permitan registrar todos los incidentes en las carreteras, para posteriormente poder filtrar toda la información deseada, por ejemplo, determinar sobre mapa las zonas donde hay accidentes con animales (así como el número de accidentes ocurridos, o los tipos de animales que los han ocasionado, entre otros muchos elementos). Para ello, sistemas como la Agenda de Vialidad de Carreteras (del Sistema de Gestión Web de Carreteras) de Iternova, son imprescindibles.
- 2.- Involucrando a los ciudadanos,y ofreciéndoles los sistemas que les permitan dar a conocer a las autoridades cualquier incidente provocado por animales, fotografiando la zona, y enviando la imagen geolocalizada, para facilitar el registro y la solución del problema.
- 3.- Colocando sistemas que ahuyenten a los animales, en aquellas zonas previamente registradas como problemáticas. Por ejemplo, las empresas Natur Futura y Alvac están llevando a cabo un proyecto de investigación para aplicar en aquellos lugares en los que se detecte una elevada accidentalidad debida a la irrupción de animales en la vía, que consiste en una “barrera química” que ahuyente a los animales y les disuada de cruzar la carretera. La barrera, todavía en fase experimental, está compuesta por sustancias químicas biodegradables que son totalmente respetuosas con el medio ambiente y la fauna y no suponen peligro alguno para las personas.
- Otra opción es contar con sistemas disuasores de fauna, que cuando detectan la luz de los vehículos, reflejan a su vez una luz roja que molesta y ahuyenta a los animales de la zona, evitando que pasen por la vía.
- 4.- Integrando tecnologías en los vehículos que avisen de la presencia de animales en las carreteras, con sistemas como el desarrollado por Volvo, cuyo objetivo es detectar a los animales que cruzan por la carretera, activando una alerta acústica para avisar al conductor en ese mismo momento. El sistema se compone de un sensor de radar y una cámara de infrarrojos, que permite localizar a los animales incluso en condiciones de poca visibilidad
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