Conseguir tener un tráfico más fluido en nuestras ciudades, evitando atascos y ofreciendo rutas óptimas a los conductores, es un objetivo común a responsables del tráfico de todas las ciudades del mundo, y uno de los sectores donde más se está investigando, y donde las empresas están ofreciendo soluciones más innovadoras.
En la web de BBC Mundo nos presentan cinco tecnologías que, a medio plazo, es muy posible que veamos en nuestras ciudades, y que sin duda pueden contribuir a contar con una mejor circulación en las mismas:
- Uso de cápsulas autónomas de transporte: El proyecto liderado por John Miles, que pretende convertirse en una realidad en las calles de Inglaterra durante el próximo año, consiste en una flota de cápsulas que circularían sin necesidad de conductor por la ciudad, conectando diferentes puntos de interés de la misma. Estas cápsulas están optimizadas para hacer viajes cortos (dentro de la ciudad), y su diseño puede permitir aprovechar mucho mejor el espacio de las calles, pudiendo colocar varias cápsulas muy juntas, ya que al ser controladas de forma autónoma y segura, no existe (aparentemente) riesgo de choque.
- Semáforos inteligentes y sensores en las calles: Conseguir sistemas ITS en las ciudades que realmente respondan en tiempo real a las necesidades observadas en cada momento, es una línea de trabajo que cada vez se está utilizando más en nuestro entorno. En esta línea podemos ver los numerosos proyectos relacionados con semáforos inteligentes, o el uso de sensores en las ciudades, de los cuales ya hemos hablado en Tecnocarreteras en numerosas ocasiones.
- Coches autónomos (sin conductor): Cada día que pasa nos acercamos más a una realidad, la de los coches autónomos, que puede revolucionar por completo la circulación, el tráfico, y la propia organización de nuestras ciudades. El uso de vehículos autónomos, y de vehículos comunicados, puede ofrecer una eficiencia máxima en los desplazamientos de los mismos, al tener en cuenta todos los factores necesarios para optimizar el tráfico, pudiendo actuar cada vehículo en función del destino al que desea llegar, y del estado del resto de coches.
- Aplicaciones para facilitar el aparcamiento: Uno de las causas del enorme tráfico en los centros de las ciudades es la dificultad que tienen los conductores para encontrar una plaza de aparcamiento. Se estima que, en las grandes ciudades, un porcentaje cercano al 15 % de la congestión del tráfico en las zonas centrales se debe a este motivo. El uso de nuevas tecnologías, basadas en sensores que permitirían conocer las zonas libres para aparcar, y en aplicaciones que ofrecieran esa información multiplataforma la usuario, puede conseguir reducir este problema, y llevar asociado una disminución de los atascos existentes.
- Big Data: Como vimos con el Proyecto Scope (una plataforma cloud abierta para ciudades inteligentes), la gestión eficaz de la enorme cantidad de datos que van a ser generados en las ciudades inteligentes por los sensores y equipos transmisores, puede suponer una enorme ventaja para los gestores que dispongan de esa información organizada. De esta forma, convertir una basta cantidad de datos en informes y sistemas útiles para la toma de decisiones, va a ser un trabajo necesario, en el que se tendrán que emplear tecnologías de Big Data, cada día más avanzadas. Sistemas como Scope, del que ya hemos hablado, son una avanzadilla de lo que veremos en los próximos años.