Buenas noticias para los que llevan tiempo apostando por las carreteras solares (cuyo máximo exponente es la empresa Solar Roadways): El proyecto SolaRoad, una bicisenda solar de 70 metros colocada en Amsterdam, está generando mucha más energía de la estimada cuando se instaló.
SolaRoad es un proyecto que trabaja doblemente por la sostenibilidad, ofreciendo un entorno para bicicletas, una parte del cual (70 metros) está cubierto por paneles fotovoltaicos.
Los resultados de los primeros meses del proyecto no pueden ser más halagüeños, estimándose que se podría generar más de 70kWh por m2 cuadrado cada año.
Realidades como la presentada en Amsterdam, o medidas como la llevada a cabo por Francia en su apuesta decidida por las carreteras solares, hace que seguro que muy pronto podamos ver la expansión de esta tecnología que pretende aprovechar el enorme espacio utilizado por las carreteras para generar energía limpia, que pudiera servir tanto para la propia carretera (para su calefacción interna ante nevadas o heladas), como para hogares e industrias.
Para conocer un poco mejor cómo funciona esta tecnología, el siguiente vídeo pretende facilitar su comprensión: