En la búsqueda de soluciones más sostenibles que permitan aprovechar las energías limpias, Holanda acaba de presentar su primera calle capaz de generar energía solar, dentro de un proyecto bautizado como SolaRoad.
La idea consiste en cubrir las vías con paneles solares capaces de aprovechar la energía solar, de forma que la infraestructura cumpla un doble servicio: permitir los desplazamientos de vehículos o bicicletas, pero también generar una importante cantidad de energía que se pueda aprovechar, por ejemplo, para la carga de farolas o dispositivos ITS, o bien incorporando la electricidad en la red eléctrica general.
En la actualidad, el primer carril que está en funcionamiento dentro de este proyecto se trata de una vía para bicicletas en Amsterdam, de 70 metros, que está ofreciendo unos resultados mejores de los previstos.
Este proyecto no es el único que va en esta línea, ya que cada vez se está apostando más por este tipo de soluciones:
- Francia ha hecho una apuesta decidida por la implantación de las carreteras solares.
- Solar Roadways, la empresa estadounidense de carreteras solares, va ganando protagonismo e importancia
- ¿Por qué es tan interesante aprovechar las enormes infraestructuras de las carreteras como fuente generadora de energía?